Lanzamientos a la luna, ciencia espacial y pequeños pasos

By Ana Cruz • September 13, 2019

Artículo escrito por: Jon Miller
Traducción y adaptación: Ana Cruz

Read this article in English HERE!

En julio pasado celebramos 50 años de aniversario desde que el hombre piso la luna en la misión Apolo 11. Después de medio siglo somnoliento en el que la exploración espacial no ha sido impulsada a gran medida, finalmente el interés de enviar humanos más lejos en el espacio está creciendo desde los programas espaciales comerciales y gubernamentales. Desde una perspectiva de mejora continua, una visión negativa de esto es que no hemos podido mantener o construir sobre las ganancias obtenidas en 1969. Por otro lado, una visión más positiva es que hemos pasado los últimos cincuenta años directamente observando, recopilando datos y entendiendo la condición actual del sistema solar, la galaxia y el universo.

Hay varios paralelos que podemos dibujar entre la misión Apolo 11 y la búsqueda de la mejora continua.

Lean no es ciencia espacial, pero puede parecerlo al principio.

La expresión "no es ciencia espacial" significa que el tema no es difícil de entender o hacer. Al final de la Segunda Guerra Mundial la ciencia de cohetes era un campo nuevo. Había un número muy pequeño de personas con experiencia en el tema. Los principales científicos de cohetes eran tecnólogos militares alemanes. Fueron traídos a los Estados Unidos para contribuir al programa espacial. Cuando se acuño a expresión, la ciencia de los cohetes era nueva, parecía complicada y dependía de la experiencia extranjera. Hoy en día la ciencia de cohetes es un campo bien establecido, no particularmente difícil de aprender si uno tiene la voluntad y dedicación para estudiar y aplicarlo. Podemos decir exactamente lo mismo sobre la gestión Lean.

La transformación Lean es una serie de lanzamientos a la luna.

La misión Apolo 11 para enviar humanos a la luna fue literalmente el primer lanzamiento a la luna. Creo esa expresión, que en los negocios hoy en día es sinónimo de un proyecto extremadamente ambicioso, impresionante o innovador. Los lanzamientos a la luna son grandes visiones que unen a las personas, amplían nuestro pensamiento y nos inspiran a luchar por cosas mejores. Del mismo modo, en el pensamiento Lean, imaginamos el proceso o condición ideal, definimos las tecnologías necesarias, identificamos los obstáculos y enfrentamos los límites de nuestro conocimiento. Estudiamos, practicamos, adaptamos y, a veces, inventamos métodos para ayudarnos a lograr nuestra condición ideal.

Un pequeño paso, y luego otro.

Cuando Neil Armstrong salió del Módulo Lunar a la luna dijo "Ese es un pequeño paso para un hombre, un salto gigante para la humanidad". Las siguientes acciones de Armstrong en la luna fueron saltar alrededor de una sexta gravedad, mirar fijamente nuestro planeta azul y recoger algunas rocas. La declaración de Armstrong fue espiraciones, y contenía la esperanza de que la humanidad construiría en la superficie de la luna par así enviar personas a Marte y más allá. La mejora continua es una serie de pequeños pasos deliberados. Después de repetidos pasos, a veces un pequeño paso en particular es un momento decisivo cuando anos de esfuerzo se unen para lograr un gran objetivo.

El lanzamiento a la luna del Apolo 11no fue valioso debido a lo que sucedió en su destino, el valor para la humanidad fue mostrarnos que a través del trabajo en equipo y el desarrollo enfocado de tecnologías específicas, podríamos lograr cosas increíbles. El programa espacial desarrollo capacidades científicas que han beneficiado a la humanidad en los campos médico, informático, de transporte, ambiental, industrial y otros. Ver nuestro planeta azul sobre un fondo negro nos dio la perspectiva de apreciar nuestro hogar. Al igual que el viaje de mejora continua, las recompensas no provienen de llegar a los puntos intermedios y destinos, sino de lo que aprendemos sobre nosotros mismos y nuestro mundo en el camino.