¿Cómo Deje De Plantearme Propósitos De Año Nuevo?
By Ana Cruz • January 5, 2017
Artículo escrito por: Jon Miller
Traducción: Ana Cruz
Fecha original: 4 de Enero del 2016
Un amigo me preguntó la semana pasada sobre mis propósitos de Año Nuevo. Para sorpresa de ambos mi respuesta fue "No tengo ninguno". Esto también me hizo reflexionar sobre el porqué no me había planteado mis propósitos para este año. No es que deje de hacerlo intencionalmente, ¿me estaba volviendo más flojo? ¿Estoy feliz con mi situación actual?, ¿o simplemente se me olvidó?. Después de reflexionar un poco fue evidente que durante todo el año pasado estuve siguiendo un proceso que hizo que no tuviera necesidad de plantearme propósitos de Año Nuevo.
En el pasado, como muchas personas, traté de planificar por lotes los objetivos del año entre Diciembre y Enero y como a muchos de ustedes, mis resultados eran variados. También al igual que muchos gerentes, una buena parte de mi carrera consistía en enfrentar crisis y oportunidades que aparecen durante todo el año a menudo distrayéndome de los propósitos que me había planteado en enero. Cuando nos programamos dichos propósitos lo hacemos con la mejor de las intenciones pero no siempre podemos seguir adelante. Pero durante el último año he encontrado una manera de mantenerme más enfocado. A continuación les presento los principales elementos de dicho proceso que han hecho que los propósitos de Año Nuevo sean innecesarios para mi :
Tablero diario de Kami: En la foto de arriba les comparto un consejo para auditoria de dicho proceso, el seguimiento de la actividad con objetivos a largo plazo ligeramente basado en el tablero Kamishibai (abreviado Kami). Se realiza con notas adhesivas color naranja y verde pegados uno en seguida del otro. El lado naranja visible indica que no se ha realizado la tarea y el color verde indica que se ha realizado. Las ranuras o especies de bolsillos son solo cortaduras que hicimos en el papel y lo reforzamos con cinta adhesiva para que las notas no se caigan. En las tarjetas se escriben los "estándares o acciones que me mueven hacia mis metas todos los días. Ellos incluyen cosas como hacer ejercicio, escribir, dar un paseo con mi esposa, y una categoría general de "avances en proyectos a largo plazo" que me recuerda el trabajar en mejoras para el hogar, planificación financiera familiar u otras cosas que son sensitivas en tiempo e importantes. Cada una de estas acciones son en apoyo a uno o más objetivos a largo plazo. Por ejemplo la caminata diaria apoya mi meta de salud y la armonía de mi matrimonio.Comienzo mi día con todas las tarjetas en color naranja y se tornan en color verde una vez que realice las acciones. Algunas tareas no son diarias, tal vez solo las realice los Lunes, Miércoles y Viernes pero las coloco en color verde durante los otros días también. Durante el año he actualizado unas cuantas veces el tablero, pero siempre lo mantengo simple y a lápiz y papel.
Estándares Visibles: Estas son ojos escritas a mano o impresas con instrucciones detalladas para cuando la acción de Kami lo requiere. La rutina semanal de ejercicio la imprimo y pego en mi cochera. Las tareas de escritura las pego en mi escritorio. No tengo una tarjeta estándar escrita de caminata diaria pero tratamos de encontrar una hora al rededor del medio día, dependiendo de la temperatura, recados o pequeñas tareas, otras prioridades y planear la ruta. El propósito de estos estándares pegados en lugares clave es reducir el tiempo pensando y decidiendo qué hacer, pero además para tener un estándar de ejecución el cual podemos ajustar e incluso mejorar con el tiempo. Por ejemplo el año pasado comencé nuevamente a levantar pesas y me lastimé el hombro. Lo que aprendí de esto es que ya no soy un jovencito pero también mi técnica de levantamiento de pesas era muy mala, de acuerdo a YouTube y lo ultimo en medicina del deporte. El ejercitarme en un gimnasio y con un entrenador me hubiera evitado este dolor. Pero dicho dolor físico es un recordatorio de la importancia de plantearnos metas realistas. Esta experiencia mejoro mi 'estándar visible' de rutina de ejercicio y la volvió más razonable.
Diario Hansei: Cada noche antes de dormir escribo un par de frases en una libreta. Dichas frases son una reflexión de como me fue ese día con mis acciones Kami. El mejor de mis días es cuando soy capaz de confesar mis fallos, son honesto y pienso en cambiar y lograr el Kami o las reglas. El proceso Hansei también me ha ayudado a identificar en que partes siento menos motivación debido a que mi meta u objetivo no estaba clara. Durante la temporada de Futbol Americano la motivación que siento para ver los partidos es muy alta, y estos lapsos de 3 horas varias veces a la semana pueden interferir en mi trabajo y enfoque de mis actividades Kami. Así que por seguro ajusto mis actividades Kami entre febrero 8 y septiembre.
¿Cómo deje de plantearme propósitos de Año Nuevo? De hecho fue por accidente, pero aquí les comparto algunas lecciones generales. Primero, tuve que eliminar demandas de mi tiempo que me distraían u obstaculizaban de hacer acciones pequeñas que ayudaran a mis metas de largo plazo durante el año. Ese cambio de técnica que hice me quitó esa sobrecarga que constantemente tenía durante el camino. El tener la oportunidad de seguir una rutina diaria, de equivocarme de vez en cuando e intentar de nuevo ha sido esencial para el desarrollo de este proceso. La carga de trabajo aún varia diariamente, y el lograr todas las notas adhesivas en color verde en mi tablero Kami sigue siendo un reto en muchos días. Segundo, el desglosar metas grandes en cosas más pequeñas que pueden realizarse el día que especifiquemos de la semana y que podamos incluirlas en nuestro Tablero Kami. Tercero, hacernos el habito de progreso frecuente, revisiones y correcciones. En mi caso hago esto varias veces al día mientras trato de lograr las 12 tarjetas de mi tablero Kami al día, Y es muy raro que logre convertir todas esas tarjetas a verde por varias razones. Así completamos nuestro Diario Hansei.
No espero que mi manera especifica de realizar mi PDCA personal funcione para todos, pero seguiré aplicándola y aprendiendo de ella.
¡Les deseo a todos un seguro, próspero y feliz Año Nuevo!